Poemas en Akra Leuka (xx) - Josemanuel Ferrández Verdú
Schoenber: Cuarteto nº 2
El hacinamiento de detritus mentales fue una de las consecuencias de la escritura automática, descontrolada de la razón, medio que se utiliza en la siquiatría para que la libre asociación de imágenes resuelva la ecuación de la identidad de quien parece haberse disociado del mundo. Proceso es este similar al de echar la red y recoger cuanto haya en el mar: y lo que importa es saber ordenar esos detritus hasta descubrir el rostro que conforman. De modo que el surrealismo y sus adláteres no son sino una visión oculta y fragmentada de lo que descubre quien sabe diafanizar la oscuridad.
Poética es esta de todo buen creador: sembrar semillas de cualquiera clase, mezcolanzarlas para descubrir nuevos frutos, flores nuevas. Desde el primer poeta hasta el último: todos han padecido el ataque de la fiera Metáfora y han perecido en el intento de domesticarla, o la han domesticado: uniendo dos sonidos guturales, dos palabras, dos notas, dos colores... hasta forjar un lenguaje de lenguajes, una ecuación verbal que contenga el universo y exprese lo inefable.
Este poema de José Manuel Ferrández Verdú -que fue más contemplativo que partícipe de la que llamé, humorísticamente, "Generación de la preguerra" oriolana- no es ajeno a ello: indaga en el decir numeroso apoyándose, desde el título, en el poema de Mallarmè y sinuosidando con recurrencias un más allá y un azar que nunca es objetivo como no lo es nunca la pluma:
JAMÁS AUNQUE LANZADO 18-12-17 Jamás aunque lanzado Encircunstancias inversas Un golpe de mar tirarálos dados Contrarios al crepúsculo Entre el azar de las alas Aunque lanzáramos las alas mismas De naufragados suburbios De crepúsculos inciertos Oigo un ejército de ojos Subir a la encinta noche De lagunas,cumbres Un hombre clamaa Job Dice vamos al valle De Eliam e Israel A compartir la elocuencia Con los ciegos Con los tramposos Con los emisarios de la agonía Donde abunda la espiga Jamás aunque lanzado En circunstancias desnudas Desde un desierto fondo Un golpe de azar Abolirá el ansia Somnolienta Sin laderas ni espuma Furiosamente dócil Planee como símbolo Por los claustros de la sombra Jamás aunque hundido Bajo el baile terrenal y a la luz de los dados El dulce rincón boca abajo Daríamos por perdida su cosecha de salvajes espigas En los días en que fluye la bestia Hacia modestos misterios Liberados de su pasión por las terrazas Jamás Aunque ya no la quiera Nosotros los que hicimos el viento Desde el oprobio infantil y sagaz Ya no lanzaremos los granos de uva Y el guarismo se irá pareciendo al sol Entonces ellos sí la querían Y tú sobre el árbol triste Lanzandoamarillas hojas de fuego En circunstancias de fuego jamás aunque En su navegación verde y negra Con botavaras de cansado azúcar Viento de pomposo malestar Y un viejo candil para su silencio fuerte Aunque yo no profesara su miel Sabríamos acceder a la piedra Piedra limpia como las gaviotas Nacidas durante el naufragio aunque jamás Se hayan acabado los perdidos días de invierno Encontraríamos el azar rondandosu lecho anónimo Viento que jamás repartirá sombras Ni siquiera para los suyos Los de entonces, conocedores del ámbar Desde un grito precoz Nave para la cueva Ella nació como una sílaba En abril con la íntima corriente En el limbo estrecho y generoso Ansia ocupada al azar que la nutre Voraz imagen de estrellas consumidas Pasó cerca del hombre y le dio un eco De los surcos y las enredaderas Vaciándose en el horizonte Por silenciosos motivos que alentaron los decálogos Frágiles como tumbas Codiciosos y llenos de alimentos Nunca más lanzaremos el terrenal desnudo Mordaz agujero de la lluvia Que viniera adverso Y agitaa supadre despojado de las antiguas urnas Ellas y el cabello de los esclavos En dulce procesión sin cadencia Caducado ritmo convertido Herodías a nuestro alrededor Puso a saltar desde el ligamento Su alta lengua Y le dijocalla antigua No sabes que hoy es día de difuntos De los secos y del oro Pero ella roció su cuerpo con sonidos tapados Tapáronse los ojos de barro Y segaron la hoz con su boca En las cumbres Por azar
Magnifico poema.
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