poème d’un autre
si de mi baja lira tanto pudiese el son
escribiría un verso como una guadaña
donde apoyar este cuello que yergue el fraude de mi mente
obstinada en ser dios o en ser poema
inédito creador definitivo
en la vorágine del vértigo las sílabas se agrupan
como tercas monodias hacia la sinfonía
persiguiendo la inamovible música del arte
pero siempre hay un corno un violín una nota
que introduce despierta interpola
su amoroso y odiado fantasma
y convierte en un réquiem mi escritura
cierra los ojos pienso cierra el poema pienso
y no obstante mi mano contumaz en su costumbre
rubrica su locura su frustración confirma
y es tanto así que
cuando me paro a contemplar mi estado
vayse meu corazon de mib
llevo mi pensamiento hacia el olvido
conduzco mi dolor por los cauces de la frivolidad
a ver recuerda aquel amor de aquel verano
como dos peces muertos frotando sus escamas en la arena
estuviste con ella pero siempre
cargado voy de mí doquier que ando
y aparecen coágulos de lecturas como arrecifes en mi alma
y entonces aquel beso sólo es la Dulcinea perdida
que nunca encontraré si no es amando a Melibea
por ejemplo
o adentrando en mis ojos el retrato de Filis
nunca visto pero siempre adyacente al de Ximena o Lisi
que me besan me aman me susurran
agora nos partimos Dios sabe el ayuntar
me gritan me susurran
con los sus ojos tan fuertemientre llorando
y yo no sé sino llorar y buscar con palabras opacas
un verso una guadaña porque
no me podrán quitar el dolorido
sentir
y así a veces en lucha con el amor estoy
y entierro mi dolor entre memorias huecas
que a jornal de mi pena y mi cuidado
cavan en mi vivir mi monumento
salid sin duelo lágrimas corriendo
No hay comentarios:
Publicar un comentario