Grofé: Suite del Gran Cañón
En todas las épocas ha habido miles de artistas y poetas. El tiempo ha seleccionado a unos pocos que identifican en su obra al hombre universal e intemporal. En El Siglo de Oro, por ejemplo, hubo cientos de contemporáneos de Cervantes, Velázquez y T. L. de Victoria: hoy solo quedan unos pocos verdaderamente grandes. ¿Cómo no va a ser igual con los pretenciosos actuales?
Quienes se preguntan por qué el arte de las últimas décadas no es respetado y encumbrado tengan en cuenta lo anterior. Además de que no sabemos qué dirán los venideros siglos. Y, además, de que la frivolidad e incultura de la vida moderna empuja a considerar artistas a todos cuantos así se autodenominan.
Que no consigue ser esto o aquello el que quiere, sino quien puede.
No hay comentarios:
Publicar un comentario