Mussorsgki compuso los Cuadros de una exposición para ilustrar musicalmente las pinturas y dibujos de su amigo Hartmann. Seguramente quería dibujar con música un homenaje. Se imagina yendo de un cuadro a otro, y cada vez que lo hace se repite el leitmotiv del trayecto: el paseo, que suena así en la orquestación de Ravel:
Paseo
El primer cuadro ante el que se detiene es El Gnomo: y la música parece estallar entre brujerías:
Así suena en la version inicial para piano:
Después de diez cuadros, finalmente se detiene ante La gran puerta de Kiev:
De esta manera, esplendorosamente, acaba:
La versión orquestal completa, con las obras de Hartmann:
La versión pianística original:
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