Visitas

Seguidores

domingo, 8 de julio de 2018

Non Nobis Solum.


R. Strauss: Metamorfosis

Te despiertas con un sabor amargo entre los labios del alma: ayer no fue un día esplendoroso, sino atormentado. No pasó nada terrible, pero sí llegó el eco, como todos los días, del "Hay golpes en la vida tan fuertes, yo no sé..." del penurioso César Vallejo. Y suena el becqueriano "Hoy como ayer, mañana como hoy, y siempre igual...".
     Y qué hacer hoy, ante semejante perspectiva, sino volver a recibir el oleaje de la melancolía, del sinsentido de levantarte para hacerte preguntas sin respuesta que derriban tu afán de luchar para sobrevivir. Qué hacer, si no puedes salvarte, si no puedes salvar el mundo del desbocamiento hacia el abismo. Qué hacer sin tener una razón para seguir viviendo. 
     Miras hacia todos los lados de la vida y de la muerte; y de pronto lo ves con claridad, aunque por un instante: sí puedes hacer algo para salvar el mundo: concentra en un anhelo todo cuanto deseas para la humanidad y haz algo por una sola persona, sonríele, dale la esperanza que tú no tienes, muéstrate ante ella como si la tuvieras, dale la mano, conviértela en tu obra buena, en tu razón para seguir viviendo... Al final esa sonrisa solidariamente impuesta acabará transformándote a ti, será tuya realmente, le dará un sentido a tu existencia porque has apostado por la esperanza en vez de cultivar la desesperación.
     ¿No es eso lo que predica Voltaire, al final del Cándido, cuando habla de cultivar el jardín propio? ¿No quería decir que el polen de las flores va de un jardín a otro y perfuma el mundo? ¿No hacía lo mismo Unamuno en su nivola sobre el bueno de don Manuel?
     Vuelve a mirar el mundo: eso es lo que hicieron Buda, Confucio, Jesucristo... Aunque el menestoroso y apiadado Cervantes crease a  Don Quijote para demostrar que el mundo no tiene solución. 



8 comentarios:

  1. Sí, el mundo no tiene solución. Nosotros hacemos o somos el mundo y hay que vivir en él.Cada uno en su parcela que haga lo que pueda, que aunque a todos nos caiga la misma agua siempre habrá alguien que le parezca que la suya es mas pura y mejor.

    Menos mal que siempre hay alguien con cordura, y exquisita sensibilidad
    como usted, en esta parcela de G+.

    Saludos

    ResponderEliminar
  2. Su comentario me trajo a la mente el poema «Los justos», de Borges:

    Muchas gracias, profesor, por aquella sonrisa. Incluso cuando yo no fui su destinatario.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Extraño es que me lleguen ahora, tan alejados en el tiempo, estos mensajes. No entiendo lo de la sonrisa. Gracias, en cualquier caso.

      Eliminar
  3. Que el mundo no tiene solución es una cosa sabida. Los errores del pasado no sirven para remediar los de hoy. Nosotros como gotas de agua creemos no poder hacer nada y nos
    desesperamos, aunque una gota de agua hace rebosar un vaso. Guardemos la esperanza como Pandora.

    ResponderEliminar
  4. Que el mundo no tiene solución es una cosa sabida. Los errores del pasado no sirven para remediar los de hoy. Nosotros como gotas de agua creemos no poder hacer nada y nos
    desesperamos, aunque una gota de agua hace rebosar un vaso. Guardemos la esperanza como Pandora.

    ResponderEliminar
  5. Más vale hacer algo aunque temamos que para nada sirve. Mantenernos al margen sí es absolutamente cierto que no cambia nada.
    Saludos.

    ResponderEliminar