Clara Wieck: Mazurka
El autor y su musa
Siempre dices: demuéstrame que me amas.
Y yo te juro amor y te regalo
joyas, viajes, palacios, cacerías;
y te escribo poemas, lanzo pétalos
de rosas a tu paso.
Pero nada te basta, todo es poco.
Ya no distraigo mi entusiasta cuerpo
con harenes ardientes
ni hogueras para brujas,
cosas que me divierten mucho
y que tanto precisa nuestro imperio.
Ya no dormimos en la biblioteca,
que trasladé a otro extremo del castillo
en prueba de mi amor.
¿Qué puedo hacer para que tu apetito
se sacie y tú seas más frugal?
¡Me sacrificaré: sea por tu amor!
¡Hoy no me llevaré un libro a la cama!
No hay comentarios:
Publicar un comentario