Monteverdi: El retorno de Ulises
Salir al mundo y conquistar la vida por todos los espacios, conocer seres de allende y horizontes nuevos que aprisionar en nuestros ojos y enriquecernos con su vastedad a fin de regresar a nuestra casa plenos de luz con la que iluminarla.
¿Quién no ha soñado con un viaje errante antes de retornar y descubrir que no hay país como el de nuestro hogar? En fin: ¿quién no ha soñado ser Ulises?
Así es: la salida del útero materno de la patria para independizarse y ser nuestro propio mentor. Eso es lo que tal vez viene a decirnos Homero en la Odisea, una vez que sus hexámetros nos han descrito en la Ilíada la guerra en busca de paz de una Troya icónica de todos los tiempos. El viaje de ida y vuelta de los héroes, como le ocurrirá a Eneas en la pluma de Virgilio o, en el otro extremo, al Cándido de Voltaire. Como le ocurre al hombre cotidiano descrito íntimamente por James Joyce: ese cuyo trayecto es el del recorrido a su trabajo mientras la mente corre por los laberintos inconscientes que lo predeterminan.
Monstruos y fábulas, sueños y derrotas, tempestades y calmas, polifemos y ninfas, infiernos y naufragios esperan en el viaje: hasta que, al fin, cansado de que sus ojos vean inhóspitos espacios dignos de fantasía, buscan la realidad de la nostalgia, la infancia recobrada, el hóspito lugar, la compañía de lo que ocurrió, la Penélope amada que hubo de abandonar para satisfacer su ser de animal cinegético.
Más allá de aventuras y desventuraciones, Ulises es el primer héroe mortal: en una mitología de dioses que actúan impunemente por saberse inmortales, Ulises es la inteligencia que piensa, la voluntad que decide para no rendirse jamás ante los obstáculos, las acechanzas de la vida y la persecución de la muerte; el que renace de sus frustraciones. Como Robinson Crusoe, argonauta cuya aventura es la odisea de la mente hacia la autosuperación: un ulises viajero por las islas de la personalidad en busca de la Ítaca interior.
Más allá de aventuras y desventuraciones, Ulises es el primer héroe mortal: en una mitología de dioses que actúan impunemente por saberse inmortales, Ulises es la inteligencia que piensa, la voluntad que decide para no rendirse jamás ante los obstáculos, las acechanzas de la vida y la persecución de la muerte; el que renace de sus frustraciones. Como Robinson Crusoe, argonauta cuya aventura es la odisea de la mente hacia la autosuperación: un ulises viajero por las islas de la personalidad en busca de la Ítaca interior.
Lecturas imprescindibles
Lecturas imprescindibles, 1
Lecturas imprescindibles, 2 (Orwell)
Lecturas imprescindibles, 3 (Saint-Exupéry)
Lecturas imprescindibles, 4 (Hesse)
Lecturas imprescindibles, 5 (Mann)
