Con qué briosa pasión interpreta Jacqueline Du Pré este concierto para violoncello de Dvorak. Brío y pasión que le fue cercenando la prematura enfermedad y muerte. La dirige su marido, Daniel Baremboim, quien empezaba a sumar a su maestría de gran pianista la de gran director.
¿Y qué decir de esta versión del trágico concierto para cello de Schumann?
¿Y de esta mujer cisne muriendo?