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domingo, 5 de abril de 2015

Un poema de Elvira Pizano (Antología, CLXVIII)


MI ÚLTIMO COLLAGE   

Cuando mi reloj de arena va llegando a su fin,
Un refrescante olor a lluvia  sacude mis sentidos.
Ángeles y querubines me conducen a mi estudio.
Abro la ventana, y atrapo una nube;
Magritte se resiste,
Pero yo la hago mía.
La convierto en un rectángulo gris ondulado,
Y la plasmo en el papel.
Fusiono sobre ella un triángulo azul metalizado
En el extremo izquierdo, y un cuadrado rojo en el centro.
                               Me alejo y observo.

Mañana es lunes y el encuentro con mis compañeros artistas
Me provoca una sonrisa.
El tema a debatir será: “El Cubismo”
Este movimiento me ha inspirado gran parte de mi obra;
Y hoy, esta aprendiz de artista le compone un poema

Recurro a Tapies, y un gran trazo negro
Cubre el extremo inferior derecho.

                                Me alejo y observo.

Es la una, la cocina me reclama.
Inicio la sopa de ajo con sus recortes de jamón,
Cebolla caramelizada, y rebanadas de pan tostado.
La dejo cocer a fuego lento.

¿Qué le falta al collage?
Entorno los ojos y pienso:
                             Efectivamente;
Lanzo al aire recortes de papel impreso
Que caen aleatoriamente en forma de tirabuzón;
Y una violenta pincelada en espiral, lo fusiona todo.
Me alejo y observo.
                           Picasso y yo lo damos por acabado.
El aroma de mi guiso  me llama. Ya puedo dejar caer (con                                                             / mucho amor)  el huevo.
                                                  (Octubre 2014)
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