Saint-Saëns: El cuco
Escribí un comentario sobre un poema de Álvaro Valverde. Quienes lo han leído me dicen que es demasiado serio, y académico -y sobre algo demasiado "abstracto"-, para un espacio tan efímero como este de los blogs. Igual opinan sobre otros escritos aquí incluidos: que mejor las palabras de fácil digestión, el apunte liviano. Que el que abre estas páginas no busca reflexiones, sino cotilleos. Lecturas olvidables.
Pues ¿qué?
¿Que quien está leyendo ahora, y hasta hoy ha leído, no sabe lo que quiere?
¿Que quien está leyendo ahora, y hasta hoy ha leído, no sabe lo que quiere?
¿Acaso es que las cosas que importan solo deben decirse desde altos sitiales, y ex catedra?
Habrá que dignificar la lectura internética -por mucho que uno prefiera el tacto de la página, el olor de la tinta, el color del concepto-.
Habrá que dignificar la lectura internética -por mucho que uno prefiera el tacto de la página, el olor de la tinta, el color del concepto-.
El blog internáutico es también -debe serlo- el estante de una biblioteca.
Quien crea que no le atañe lo que lee, otras páginas tiene para saltar a ellas; y plumas hay en la red que habrán de contentarle.
Así que aquí dejo -en la entrada siguiente- el dicho comentario.
¿A quién no le interesa asomarse a esa zona abisal que late en todos y casi todos desconocen, si en ella aguarda un probable edén?
¿¿¿¿¿¿¿¿¿??????????
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Así que aquí dejo -en la entrada siguiente- el dicho comentario.
¿A quién no le interesa asomarse a esa zona abisal que late en todos y casi todos desconocen, si en ella aguarda un probable edén?
¿¿¿¿¿¿¿¿¿??????????
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(Poemas comentados, VII): Álvaro Valverde)
