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miércoles, 6 de abril de 2016

Lecturas imprescindibles, 19: Poesía del Siglo de Oro



Byrd / Fray Luis: A Francisco Salinas



Desde mi primera adolescencia, inesperadamente y con pánico al principio, he sentido un íntimo fulgor que después me pareció descubrir en algunos poemas amorosos y místicos, y, más aún, en la música. Era como si la belleza apresada en el tedio del escepticismo melancólico que me atenazaba burlase sus barrotes y convirtiera, por un instante solo, mi infierno en paraíso.
     Y es la filtración del hombre anhelante en la monotonía cotidiana -la intuición, contemplación, arrobamiento y transfiguración de un locus amoenus, tal vez inaccesible- lo que sigue produciéndome fascinación, misterio, claridad: hipnosis inconcreta. 
     Perseguidor de esas sensaciones, y perseguido por ellas, siempre he preferido Fray Luis a Juan de Yepes: porque este busca un cielo más allá de esta vida, y aquel el paraíso del sosiego en esta: eso lo hace humano, no un mendicante de milagros. Igual preferencia siento por Lope y Garcilaso frente a Quevedo y Góngora, a pesar de la singular grandeza de los tres: carnalidad, no etereidad. Aunque una implica la otra y cada una me haya remitido a ambas. Empecé a comprenderme ante las páginas doradas de tantos autores del Siglo de Oro, como después en Dostoiewski Herman Hesse, entre otros muchos. Los siglos XVI y XVII emanan contenidamente de los paraísos y desengaños que reprimirá el XVIII y reclamará estertóreamente el Romanticismo.
      La belleza y trascendencia no son útiles solo para los sentidos sibaríticos. Son los músculos que vigorizan el espíritu y, por lo tanto, la sujeción de la materia carnal de todos los mortales. La poesía áurea recuerda la espiritualidad profana inherente al hombre que la sociedad ha ido marginando en su fuga hacia el progreso mecanicista y robótico. Su sustancia la sentía a flor de piel el homo sapiens de las cavernas, y la oculta la coraza con que la modernidad pretende insensibilizar la conciencia.
Lecturas imprescindibles

Lecturas imprescindibles, 1

Lecturas imprescindibles, 2 (Orwell)

Lecturas imprescindibles, 3 (Saint-Exupéry)