Sabemos cómo evolucionan las células, cómo se originan y se deterioran.
Las ciencias biológicas avanzan tan deprisa que no solo conocemos el ADN de la Humanidad, sino que, gracias a su estudio, pronto cada uno podremos celebrar, igual que nuestro cumpleaños, el día de nuestra muerte.
Entonces quizá deseemos tener mala memoria.