Myers: Cavatina
Muchas personas pasan por nuestra vida, como nosotros pasamos por las de otras. Unas pocas dejan su huella en las ajenas:
la alegría propia nace de saber que hemos conseguido aumentar la de los otros:
igual que los amantes se sienten más amados con el abrazo mutuo de sus cuerpos y el recíproco gozo de sus mentes.